
La selección de Javier Clemente, invicta en la fase de clasificación, cruzó los Pirineos y se presentó en el país vecino como favorita para encabezar un grupo donde también figuraban Bulgaria , Nigeria y Paraguay.
Hace 12 años atrás en el tiempo, en el Mundial de Francia' 98, todos recordamos el terrible fallo de Zubizarreta, que le marcó para siempre en el terreno internacional y que selló el destino de España contra Nigeria en otro desgraciado debut mundialista de la Roja. También en aquella ocasión partíamos de favoritos –casi al mismo nivel que el país anfitrión-, y el disparo de Lawal fue el principio del fin. Esperemos que en esta ocasión no se vuelva a reproducir tal descalabro de La Roja.